Andanza primera
Madrugada helada y un día en el que el sol devora la piel, así recordaré la circunstancia de está primer andanza. Unos cuantos pesos en el bolsillo, un corazón lleno de metas a realizar. Un arroz cocinado al fuego de una amistad familiar, una cena al fragor de otra hornilla con un gusto y sazón diferente. Tacón que hace sonar la madera, versos que son voz para el corazón, sirenas seductoras en la mente del deseo...
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